Este hombre fue pillado infranganti por dos agentes de policía cuando intentaba acceder a un vehículo que no era el suyo. Las dos profesionales intentanron identificarlo en el lugar, pero como no llevaba documentación encima, negociaron con él su puesta en libertad. El hombre tenía que quitarse la ropa y darle placer a las dos mujeres y si lograba satisfacerlas, conseguiría irse de allí como si nada hubiera pasado, el problema es que las dos mujeres están muy acostumbradas al sexo más salvaje y como el hombre no fue capaz de llegar a sus expectativas a pesar de sus intentos, después del trío que hicieron en plena calle, se lo llevaron detenido.